Es de 1988 la primera colección con Starck que nos lleva a realizar la línea «Classic», la primera meta en el mundo del diseño alcanzada por Maletti, primera empresa del mundo de este sector que propuso el binomio BEATY-DESIGN. Sobriedad clásica y rigor moderno son las características que la distinguen. El empuje a la innovación del proceso y el producto, sostenido por la idea que arte y tecnología son inseparables, ha generado esta colección, que ha cambiado radicalmente el Beauty Design. No solo simples sillones y tocadores, sino verdaderas obras de arte contemporáneo.
«El empuje a la innovación del proceso y el producto, sostenido por la idea que arte y tecnología son inseparables, ha generado esta colección, que ha cambiado radicalmente el Beauty Design.»
El diseñador de la colección:
Philippe Starck
Calificado como el único diseñador que ha alcanzado el «status de rockstar», Philippe Starck es un genio sumergido en la misma medida por loas y polémicas. Moderno y sin embargo receloso con el progreso, cautamente «self promoting» y aun así desdeñoso con la prensa, Starck ha construido un imperio del diseño sobre fundamentos de fértiles contrariedades. Efectivamente, el diseño de Starck atraviesa géneros diferentes y desafía cualquier clasificación tradicional: de los hoteles chic de Nueva York al cepillo de dientes. Según Starck, la creación de objetos y estructuras bellas es solamente un potencial subproducto de su más alta misión de crear un diseño honesto y «amoroso» que respete a los usuarios.